Al igual que el hatchback, la Volkswagen Golf Variant recibe un facelift y más tecnología a bordo, como inteligencia artificial en su central multimedia.
A pesar que los SUV han eclipsado a las station wagon, hay modelos que se resisten a salir del mercado, como la Volkswagen Golf Variant. Esta versión familiar del icónico hatchback nació con la tercera generación (Mk3) y a lo largo de tres décadas, ha seguido evolucionando hasta la nueva actualización, que entre los fanáticos de la marca se conoce como Mk8.5.
Su carrocería no luce muy diferente del modelo original, que debutó en septiembre de 2020, pero al observar con detalle se notan los cambios, sobre todo en la parte frontal. Ahora es más afilado y los grupos ópticos son más delgados, con una firma luminosa de forma horizontal, la cual se hace más llamativa al combinar el emblema iluminado con los vistosos faros IQ.Light de tecnología Matrix LED.
Lo mismo sucede en la parte posterior, sobre todo en los modelos equipados con los stops LED IQ.Light, con su patrón de encendido 3D. A nivel de personalización encontramos las líneas de acabado base, Life, Style y R-Line, con parachoques más aerodinámicos, nuevos rines de 16 a 19 pulgadas y diferentes tipos de molduras. De esta manera se puede lograr una SW con un look más elegante o deportivo.
Las fotos oficiales muestran a la Volkswagen Golf Variant con el acabado R-Line, con rines bitono y diversas molduras negras, pero yo prefiero el terminado Style, más acorde a la personalidad de este modelo. En ese caso hay rines de 17 a 19 pulgadas, varios detalles cromados en el exterior (como las franjas del parachoques) y sillas de diseño deportivo, tapizadas en ArtVelours.
Con IA para enriquecer la experiencia de usuario
A su vez, todas las Volkswagen Golf Variant incorporan una nueva central multimedia, con pantallas táctiles de 10,4 o 12,9 pulgadas. Se combina con el Digital Cockpit Pro de 10,2” frente al conductor y para optimizar la experiencia digital, la marca efectuó un actualización de su software MIB4. Curiosamente, el volante adopta botones físicos, pero se mantienen los mandos táctiles en la consola central.
Pero lo más impactante es la incorporación de inteligencia artificial (ChatGPT) en el asistente de voz IDA. Esto permitirá ir más allá de gestionar funciones del auto o tener una interacción básica con el sistema, pues permitirá enriquecer la interacción del usuario con el auto para proporcionar sugerencias, información adicional y respuestas más complejas, mediante un lenguaje intuitivo.
Todo ello sin dejar de lado un enorme baúl con 611 litros de capacidad y la posibilidad de plegar el respaldo posterior para mayor versatilidad. En cuanto a confort, hay climatizador acceso KeyLess, climatizador automático Climatronic, conectividad inalámbrica para telefonos AppConnect, iluminación ambiental LED, sillas con ajuste eléctrico y calefacción y superficie de carga inalámbrica.
La Volkswagen Golf Variant también ofrece asistencias de manejo mejoradas. Entre ellas un control de crucero adaptativo más preciso, Head-up Display y la función de parqueo Park Assist Pro. Esta permite controlar la station wagon desde un smartphone y estacionarla de forma remota. Para lograrlo es imprescindible montar el nuevo sistema de cámaras Area View, que ofrece vistas 360° del exterior.
Volkswagen Golf Variant, en función de la eficiencia
A la par con todos estos cambios, la casa de Wolfsburg también anuncia una variada gama de motorizaciones, con opciones a combustión y con diversos grados de hibridación. En ese sentido, llama la atención la opción híbrida enchufable eHybrid, que entrega 204 hp de potencia al combinar un motor 1.5 TSI y una máquina eléctrica, alimentada por una batería de 19,7 kWh de capacidad.
Lo mejor de todo es la posibilidad de tener una autonomía 100% eléctrica de hasta 100 kilómetros y recuperar hasta el 80% de la energía en solo 25 minutos, si se enchufa la batería en un punto de carga rápida (50 kW). Para aquellos que no quieren complicarse con eso, existe la opción 1.5 eTSI (de 115 hp o 150 hp de potencia) con tecnología mild-hybrid y el apoyo de un sistema de 48 voltios.
A su vez, los compradores más tradicionales podrán disfrutar de un motor a gasolina 1.5 TSI o un turbodiésel 2.0 TDI sin ningún tipo de asistencia eléctrica. En ambos casos hay dos niveles de rendimiento (115 hp o 150 hp) y caja manual de seis cambios o automática DSG de siete marchas, con levas en el volante. En el futuro se podrá incorporar un sistema de tracción integral 4Motion.
También se espera que la edición R de alto rendimiento y la Alltrack con enfoque off-road se actualicen a lo largo del 2024. Con ellas se completaría la renovación de la Volkswagen Golf Variant, que en el Viejo Continente rivaliza con modelos como Ford Focus Sportbreak, Opel Astra ST, Peugeot 308 SW y Toyota Corolla ST, así como sus “primas corporativas”: SEAT Leon ST y Skoda Octavia Combi.
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